miércoles, 1 de febrero de 2012

ELEMENTO FUEGO

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Aries, Leo y Sagitario pertenecen a este Elemento, que simboliza la valentía, la fuerza y el ímpetu. Son personas que necesitan ideales por los que luchar y destacar por su propia personalidad.

Estamos ante uno de los temperamentos más fuertes y extrovertidos del Zodíaco. Las personas que pertenecen al elemento Fuego son dinámicas, vitales, entusiastas, originales y con una gran fuerza de voluntad. Poseen una gran confianza en sí mismos y una gran intuición, lo que les puede llevar, en algunos casos, a ser individualistas y a excluir al resto de seres humanos. Son muy divertidos y positivos. No piden ayuda a menos que sea absolutamente necesario y tampoco aceptan consejos. Prefieren guiarse por sus propias intuiciones que les hacen tener una visión muy personal de las cosas. Pero el Fuego es la energía vital y estar a su lado puede ser  estímulo de motivación.

Las funciones de los signos de Fuego.-

La familia de Fuego está formada por tres signos: Aries, Leo y Sagitario, y cada uno de ellos realiza una función peculiar:

     El Cardinal del grupo, Aries, es el que abre caminos. Le encanta dirigir, arriesgarse y superarse, cualidades que hacen de él un signo con personalidad que despierta la admiración de los demás.

     Leo es el Fijo y su función es desarrollar y dar consistencia a lo emprendido, aunque tampoco le importa ser él quien inicie la aventura. Tiene buenas dotes de mando.

     El Mutable, Sagitario, disfruta con los contactos humanos y, dadas las características de su elemento Fuego, es el que infunde moral, confianza e ilusión a los demás. Tiene la capacidad de conducir a la gente a un buen objetivo.

En el amor: Activos y fogosos.-

Los ardientes signos de Fuego son tempestuosos y apasionados, propensos al puro deseo y al sexo sin tapujos. Prefieren tener aventuras amorosas sin complicaciones, espontáneas y divertidas y son tan directos en la búsqueda del placer que pueden resultar algo molestos para otros signos más delicados. Y es que ellos lo tienen muy claro: el amor es el amor y el deseo es el deseo, no hay lugar para la confusión. En pareja, sus relaciones son intensas y pasionales. Imposible aburrirse con un compañero Fuego.

     Acostumbrar a ser buenos amantes, atrevidos y entregados, y, en caso de que haya tempestad en la pareja, prefieren reconciliarse con un apasionado encuentro amoroso antes que lanzarse al diálogo, que procuran evitar. Con ellos, la llama del amor siempre debe estar encendida. Odian que la rutina haga acto de presencia en sus vidas sentimentales.

En la familia: Cálidos pero autoritarios.-

Los signos de Fuego aportan mucha calidez al hogar. Les encanta la actividad y el no parar quietos y es imposible aburrirse con ellos en casa. Huyen de la rutina y siempre tienen nuevos proyectos en mente, lo que les puede llevar, en algunos casos, a ser derrochadores.

     Los padres de elemento Fuego pasan por ser leales pero autoritarios, les encanta ser obedecidos, aunque nunca exigen más de lo que ellos pueden dar. Valoran el espíritu de superación. Los hijos Fuego, por su parte, manifiestan su fuerte carácter en sacar adelante todo aquello que se proponen. Tranquilos, porque, si se empeñan, no cabe duda alguna de que se convertirán en los mejores estudiantes de su clase.

En el trabajo: Emprendedores y creativos.-

Los Fuego son gente voluntariosa, para ellos querer es poder. Triunfar en el trabajo es vital y tienen suficiente energía como para repartirla entre sus compromisos profesionales y su vida familiar. En el trabajo son muy luchadores, emprendedores y siempre llaman la atención. Como en todos los aspectos de su vida, en la profesión también buscan una buena dosis de aventura y emoción y es en esta faceta donde dan salida a sus poderosos impulsos, a su creativa imaginación y a su enorme energía. El poder no les asusta, porque no le temen al peligro ni a exponerse. Van directos a conseguir sus objetivos y, una vez alcanzan sus logros, tampoco se detienen mucho tiempo en disfrutarlos, ya que inmediatamente se proponen otra meta. Son trabajadores y contagian su vitalidad a sus compañeros de profesión, pero, al ir tan “autodirigidos”, a veces, no ponen atención a las personas que les rodean con intereses distintos y contrapuestos a los suyos.

En la salud: Pura energía.-

Oír a una persona del elemento Fuego quejarse por algo sería realmente sorprendente. Y es que la gente de estos signos no acostumbra a dar importancia a un dolor de cabeza o a una pequeña indisposición, por lo que sus citas con los médicos suelen ser poco frecuentes. La fortaleza mental de estos signos también es física y son capaces de sacar fuerzas aunque no las tengan y agarrarse a esa energía y a esa vitalidad que tanto los caracteriza.

Su mejor arma: Los tres signos pertenecientes a Fuego tienen en la voluntad su mejor arma. No sólo tienen la seguridad de lo que ha de hacerse, sino que además poseen la voluntad para llevarlo a cabo. Tienen la capacidad de dominarse y dominar a los demás con el ejemplo, contagiándoles la fuerza que los hace superarse y olvidar sus debilidades.

Sus puntos fuertes: Junto con la voluntad, el dinamismo, el entusiasmo, la energía, la seguridad y la decisión. Las personas con mayor énfasis en este Elemento poseen una sana autoconfianza y tienen, por lo general, un buen sentido del humor. Su optimismo y vitalidad les lleva a conseguir todo aquello que se proponen.

Sus puntos débiles: Dada la energía y el ímpetu que poseen estos signos, pueden desarrollar puntos débiles como la impaciencia, el egoísmo y la falta de sensibilidad. Demasiado Fuego también puede conducir a la extravagancia, la arrogancia y el egocentrismo y, la necesidad de seguir, pase lo que pase, la línea de actuación que se han impuesto puede hacerles caer en el fanatismo y en la intolerancia.

Su color: A los Fuego les gustan los colores llamativos y no tienen ningún reparo en utilizarlos. El color preferido, sin duda, es el rojo, por su contacto directo con temas como la sensualidad, el valor, la fuerza, la protección y la salud.

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